Sebastián García tiene ocho años y vive en La Paz, Bolivia. Sus padres han luchado durante mucho tiempo para que vaya a una escuela donde los maestros entiendan sus necesidades. Sebastián tiene autismo y ha estado expuesto a la violencia y la discriminación toda su vida. La familia ha visitado y probado más de diez escuelas especiales, pero nadie ha querido recibirlo porque los maestros y directores no saben cómo tratar a un niño con autismo.
A 200 km, en la ciudad de Cochabamba, también vive desde hace ocho años Emanuel Yucra. Tiene una discapacidad auditiva y su familia puede contar experiencias similares. Tanto los médicos como los maestros les dijeron a los padres de Emanuel que nunca podría aprender nada, por lo que no se le permitió comenzar la escuela. La familia aprendió por sí misma lo que realmente significa la discapacidad de Emanuel.
Los niños con discapacidad son discriminados
Si bien la educación es un derecho fundamental consagrado en la Declaración de los Derechos Humanos de la ONU, la Convención sobre los Derechos del Niño y la Convención de la ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, muchos niños con discapacidad en Bolivia comparten la experiencia de no poder asistir colegio. Un sistema escolar obsoleto, la falta de conocimiento y personal capacitado contribuyen a la discriminación a la que han sido sometidos los niños Sebastián y Emanuel.
La mayoría de los países, incluido Bolivia, han realizado algunas inversiones en escuelas especiales para niños con discapacidad. La experiencia demuestra, sin embargo, que la segregación en las escuelas especiales ha dado lugar a una nueva forma de exclusión.
- Cuando los niños con discapacidad se educan por separado, se dificulta la integración en la sociedad. Todos se benefician de aprender unos con otros, dice Margot Vina Pelaez, profesora y directora de una escuela que trabaja con una forma de educación inclusiva.
Hoy, por tanto, varios expertos abogan por la "educación inclusiva" en lugar de las escuelas especiales. La educación inclusiva generalmente significa que los niños con diferentes condiciones van a la escuela juntos. Pero en muchos países, la oposición a la inclusión de niños con discapacidades en la educación general sigue siendo fuerte. En los países en desarrollo, que a menudo carecen de calidad en la escuela en general, la educación inclusiva sigue siendo un concepto del que pocos conocen el significado.
SE REQUIEREN CAMBIOS EN VARIOS NIVELES
En Bolivia aún queda mucho trabajo por hacer antes de que hayan logrado crear una escuela común donde la enseñanza se adapte a las diferentes necesidades de los niños. Como el conocimiento de diversas discapacidades es aún bajo, el trabajo de inclusión en las escuelas se hace más difícil. Tanto los políticos como el personal escolar y de atención y el público en general deben comprender qué significan las diferentes discapacidades y qué necesidades y derechos tienen las personas con discapacidad.
Los padres de Sebastián tuvieron que luchar durante varios años para que su hijo tuviera el diagnóstico correcto. Los médicos pensaron durante mucho tiempo que era sordo antes de darse cuenta de que tenía autismo. Cuando nadie sabe qué discapacidad tiene un niño, es difícil que los maestros sepan cómo adaptar la enseñanza y puede ser imposible encontrar una escuela que pueda satisfacer las necesidades del niño de la manera correcta.
Como ninguna escuela especial lo aceptó, eventualmente tuvo que comenzar en un preescolar para niños "comunes". La esperanza era que la interacción con los otros niños lo ayudaría. Pero el personal lo encerró en su propia habitación.
Su padre, Franklin García, dice que Sebastián solía llorar durante varias horas después de que lo recogieran del preescolar.
- Al personal le faltó conocimiento y calidez humana, dice Franklin García.
Las escuelas piloto deben mostrar cómo la educación inclusiva puede funcionar en la práctica
En los últimos años, ha habido algunos cambios positivos. Se han promulgado nuevas leyes que se enfocan más claramente en la educación inclusiva, lo que ha afectado en parte la forma en que las personas del sector educativo se relacionan con los niños y jóvenes con discapacidad. Mirta Sejas del Ministerio de Educación dice que los nuevos textos legales han provocado cambios en el plan de estudios y que se han establecido nuevos cursos en métodos de enseñanza inclusiva y pedagogía inclusiva.
- La docencia en escuelas especiales y en diversos centros de día debe verse ahora como una forma de abordar una educación inclusiva. También se han designado equipos especialmente capacitados para desarrollar criterios y evaluar qué niños con discapacidad deben ir a la escuela especial y cuáles deben integrarse a las escuelas regulares, dice Mirta Sejas, jefa del departamento de educación inclusiva de la autoridad escolar de Cochabamba.
Margot Vina Pelaez es profesora y directora de una escuela especial que acepta personas con diversas discapacidades y también apoya a 900 niños y jóvenes con discapacidad que asisten a la escuela regular. Ella dice que su escuela recibe apoyo del gobierno para poder usarse como un modelo piloto de cómo se puede diseñar y funcionar la educación inclusiva en la práctica.
- Pero los desafíos son muchos. Varios maestros se oponen a los cambios al mismo tiempo que algunos padres sobreprotegen a sus hijos y no ven su potencial, dice.
Los educadores con el conocimiento y las habilidades adecuadas significan todo
Sin embargo, los padres de Emanuel están entre los que han luchado por la escuela para permitir que Emanuel se desarrolle en base a sus propias condiciones. Y su lucha ha valido la pena. Hoy tiene un maestro que por iniciativa propia ha tomado varios cursos para atender mejor sus necesidades en el salón de clases.
- Todo ha mejorado mucho desde que consiguió este maestro. Ella no es como los otros profesores pero entiende cómo tratar a Emanuel, lo que ha significado que él haya aprendido mucho, dice la hermana de Emanuel, Rocío Yucra.
Los padres de Sebastian también han encontrado algo que funciona para su hijo. Hoy asiste a un centro de día de la organización DESPERTARES. Allí ha comenzado a sentirse mejor ya desarrollarse, lo que se nota en que ahora puede expresar sus sentimientos más verbalmente.
- Es imposible describir la felicidad que siento cuando mi hijo corre hacia mí, me abraza y me dice que me ama, dice su mamá Patricia Rojas y sonríe.
DESPETARES ejecuta un proyecto junto con la organización miembro de MyRight Grunden donde trabajan, entre otras cosas, para influir en la política y la implementación de una escuela más inclusiva. Paralelamente, también administran un centro de día donde los niños y sus padres aprenden cosas que aumentan su interacción y desarrollan a los niños para que más de ellos puedan comenzar la escuela después de un tiempo.
- Hasta cierto punto, ha habido un desarrollo positivo en Bolivia en los últimos años, dice Isabel Vallejo, gerente de proyectos de DESPERTARES. Pero a menudo suena mejor de lo que realmente es. Actualmente, el gobierno financia ciertos cursos y educación que aumentarán la competencia y la capacidad de los maestros para enseñar de una manera que incluya a más niños, pero en la práctica puede ser una educación de tres días, que es demasiado poco para lograr el cambio, dice.
Isabel dice que hace un par de semanas visitó una escuela que dice trabajar con métodos de enseñanza inclusivos. Lo que vio fueron niños con discapacidades que se sentaban al fondo de las aulas y no participaban en la enseñanza en absoluto.
En una sociedad inclusiva, más personas pueden contribuir y desarrollar
La educación inclusiva con una calidad aceptable es un desafío importante, sobre todo para los países pobres donde el conocimiento sobre diversas discapacidades aún es bajo. Y tal vez el derecho a la educación en alguna forma deba a veces prevalecer sobre el requisito de la inclusión total en la escuela. Pero para reducir los prejuicios y las actitudes negativas hacia las personas con discapacidad y para aumentar la participación en la sociedad, es importante continuar desarrollando la escuela hasta convertirla en un lugar donde se visibilicen más necesidades y se les dé espacio y más personas tengan la oportunidad de contribuir y desarrollarse.
Porque como dijo Nelson Mandela; "La educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo".
Texto e imagen: Sergio Reviera
